5 dic. 2010
De la nieve y el hielo se han librado los países del sudeste de Europa, que sin embargo han sufrido las peores inundaciones en 100 años.
La ola de frío ártico que envuelve Europa desde hace varios días ha provocado el caos en los sistemas de transportes de varios países, ha provocado la muerte de al menos 40 personas (una docena sólo en Polonia) y ha obligado incluso a rescatar a los patos de los lagos helados.
De la nieve y el hielo se han librado los países del sudeste de Europa, que sin embargo han sufrido las peores inundaciones en 104 años. Pueblos enteros de Montenegro, por ejemplo, han quedado sumergidos bajo el agua.
"Se trata de un comienzo prematuro del invierno, porque aún estamos en otoño", dice Omar Baddour, científico de la Organización Mundial de Meteorología, en Ginebra. "No es muy muy inusual, pero es un periodo de invierno extremo que va a durar unos días", sigue Baddour, que explica que el frío llega a causa de los vientos norte-sur que empujan el frío ártico sobre el continente, un fenómeno que también sucedió al comienzo del invierno pasado.